Hace algunos meses durante una plática con un empresario, nos enfrentamos a la sana discusión de entender por qué solo algunas personas deciden invertir recursos en su desarrollo, en aprender.
La explicación científica sobre este tema es relativamente simple: El hecho de aprender es meramente un acto intelectual, metódico, sin embargo, la experiencia de aprender es meramente emocional. Es esta experiencia emocional de aprendizaje la que generalmente nos impide experimentar dicho proceso de aprendizaje.
Cuando nos vemos expuestos a algo desconocido, que no tenemos experiencia nos encontramos en su mayoría estresados, ya que estamos fuera de nuestra zona de confort, lo cual, al estar frente a nuestro jefe, maestro o incluso otros de nuestros compañeros nos hace potencialmente tener dudas, sentirnos apenados o incluso hasta amenazados.
¡¡¡¡Este efecto a pesar de que no todos los sufrimos es un efecto normal ya que como seres humanos no nos gusta vernos expuestos, sentirnos vulnerables o torpes!!!!
En conclusión, mientras que el proceso de aprendizaje puede ser algo sencillo, el ser “aprendiz” o “primerizo” en algo puede convertirse en algo muy difícil de manejar. Especialmente cuando nos encontramos frente a un grupo donde podemos querer mostrarnos como personas calificadas y/o seguras de sí mismas.
Si no entiendes este efecto y logras vencerlo te quedaras estancado, difícilmente aprenderás cosas nuevas y lograras evolucionar.
¿Qué podemos hacer para que este proceso sea más sencillo?
- ¡Empieza por aceptar que eres Valiente! al aceptar ser un aprendiz. Entender que se necesita coraje y vulnerabilidad para exponer tus puntos débiles e intentar cosas nuevas.
- Inicia por buscar alternativas de aprendizaje donde no te sientas tan expuesto o donde no te perciban como un experto…… si te hace sentir mejor abiertamente expresa al grupo que no eres el mejor en esos temas, que estás intentando tomar riesgos y hacer las cosas de forma distinta.
- Se valiente y sé el primero en levantar la mano, en intentar hacer algo y expresamente déjale saber al grupo donde te encuentras que puedes fallar al intentarlo. El simple hecho de llevar a cabo este ejercicio va a darte mayor seguridad y tranquilidad.
- Date la oportunidad de “sentir” lo que sea: vergüenza, pena, incomodidad, fracaso. A esto se le llama coraje emocional, si te das la oportunidad de sentir, podrás hacer lo que sea
La última y no menos importante de las recomendaciones es: Siempre date la oportunidad de seguir aprendiendo, de seguir presionándote a ti mismo, asiste a seminarios, platicas, lee un libro, un artículo, ten discusiones con algún amigo sobre un tema interesante, en fin…….
Bregman P. (2019), Learning is supposed to feel uncomfortable, Harvard Business Review



